Maestría en línea o presencial, ¿cuál elegir?

Estudiar una maestría presencial o en línea no es una decisión sencilla. Si terminaste tu carrera hace varios años, lo más probable es que la idea de volver a la escuela represente muchos cambios. Y si recién terminaste la licenciatura, seguramente quieras dejar atrás la rutina que involucra transporte, salones de clases, exámenes, trabajos, etc.

Aunado, quizá, a no tener la seguridad de en qué especializarte, surge la duda de cómo estudiar una maestría. No te preocuopes, hoy te contaremos todo lo que debes saber para elegir entre estudiar una maestría presencial o en línea.

Si ya decidiste continuar con tus estudios, viene la parte más difícil: analizar los factores a tu alrededor para saber si te conviene estudiar desde tu casa o volver a la aulas. Aquí te ofrecemos una comparativa a detalle para que tomes la mejor decisión.

Maestría en línea

Flexibilidad: tú decides cuándo y cómo estudiar. Gracias a la felxibilidad de esta modalidad, puedes estudiar desde tu casa u oficina en el momento que desees. No perderás tiempo transportándote, no te enfrentarás al tráfico y tendrás el ritmo de aprendizaje que quieras.

Ahorro económico: algunas instituciones ofrecen colegiaturas más bajas al estudiar en línea. También te ahorrarás los gastos de pasajes, gasolina, comida y materiales. A través de las plataformas educativas recibirás todo el contenido que necesitas para cumplir con tus actividades en tiempo y forma.

Validez oficial y calidad educativa: durante muchos años los estudiantes no se decidían a aprender con esta modalidad porque creían que no tenía la misma validez que la presencial. También existía el prejuicio de que las empresas no seleccionaban a estudiantes que estudiaron en línea. Pero las cosas han cambiado: hoy más y más estudiantes eligen estudiar en línea por los beneficios que ofrece.

Maestría presencial

Te relacionas con más personas: aunque esto parezca obvio, lo debes tomar en cuenta a la hora de elegir entre una maestría en lñinea o presencial. Si lo tuyo es convivir, comparir opiniones frente a frente, trabajar en equipo, y los pasillos e instalaciones del campus te hacen sentir bien, no tienes que pensarlo más: lo presencial es para ti.

Networking: esta práctica implica establecer una red de contactos profesionales entre empresas y/o empleados con el fin de generar oportunidades laborales o de negocio. Si estudias de forma presencial y ya tienes una carrera o estás en busca de tus primeras oportunidades laborale, te será muy útil relacionarte con compañeros que ya tienen experiencias interesantes. En el mejor de los casos, puedes encontrar la oportunidad de tus sueños más cerca de lo que crees.

Acceso a más oportunidades de aprendizaje: al estar en un campus no tendrás problemas para acceder a talleres, conferencias o cursos que te ofrecen nuevas experiencia. Cuando estudias en línea es complicado ingresar a estas actividades, principalmente por la incompatibilidad de horarios.

Mayor oferta académica: a pesar de los esfuerzos de las escuelas, no todas las maestrías estás disponibles online. Por el contrario, si decides estudiar en el campus, es prácticamente un hechoque contarás con más opciones de maestrías.

Retroalimentación inmediata: antes una duda, no tendrás que esperar durante minutos u horas la respuesta de tu profesor o asesor. Al tener al docente frente a tu, preguntas "con tus palabras" las dudas que surjan. Así entenderás al 100% los temas. También aprenderñas de tus compañeros y compartirás el conocimiento de otras formas.