¿Te conviene estudiar una carrera universitaria?

Las personas con un mayor nivel de estudios tienen más probabilidades de encontrar empleo yde que éste sea mejor remunerado, lo que ocasiona un alejamiento con respecto a las que no cuentan con carrera universitaria. Los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos requieren cada vez más trabajadores especializados. Por esta razón, las personas con un mayor nivel de estudios tienen más probabilidades de encontrar empleo y de que éste sea mejor remunerado, lo que ocasiona un alejamiento con respecto a las personas que no cuentan con una carrera universitaria.

Quienes cuentan con un mayor nivel educativo tienen más posibilidades de entrar al mercado laboral: para los 35 países que forman parte de la OCDE, la tasa de desempleo promedio es de 12.4% entre quienes cuentan sólo con la educación primaria y de 7.3% para quienes concluyeron los estudios de secundaria, mientras que para quienes estudiaron una carrera universitaria, esta tasa alcanza 4.9 por ciento.

La tasa de empleo para las personas con educación universitaria es en promedio, dentro de los países de la OCDE, de más de 80%, por lo que es posible afirmar que ocho de cada 10 postulantes con educación universitaria encuentra trabajo. En el caso de las personas que sólo cuentan con estudios medio superiores, la tasa de empleo es de 74% y para los que concluyeron su vida escolar en la educación básica, la tasa de empleo alcanza apenas 56%, por lo que sólo seis de cada 10 personas en esta condición entra el mercado laboral.

Contar con estudios universitarios también incide en los ingresos que reciben los trabajadores. En promedio, los adultos con un título de maestría, doctorado o equivalente ganan casi el doble de los que cuentan con educación media superior en los países de al OCDE, y los que tienen una licenciatura o un título equivalente ganan 48% más, refiere el estudio de la OCDE.

En países como México, Colombia y Brasil, la brecha salarial entre quienes estudiaron algún nivel de educación superior y quienes cuentan con educación básica incompleta es mayor que en países considerados desarrollados, como Canadá y España. En México, por ejemplo, el porcentaje de adultos con educación por debajo de secundaria y un salario mayor a la media rebasa apenas 25 por ciento. Mientras que entre quienes cuentan con estudios universitarios, al proporción de quienes reciben un salario mayor a la media alcanza casi 80 por ciento.